
El odio "no tiene cabida en Francia", afirma Macron tras apuñalamiento de un musulmán

El racismo y el odio no pueden tener cabida en Francia, declaró este domingo el presidente Emmanuel Macron tras el apuñalamiento mortal de un musulmán en una mezquita del sur del país.
"El racismo y el odio por motivos religiosos no pueden tener cabida en Francia. La libertad de culto no se puede violar", escribió Macron en X en su primer comentario sobre el ataque del viernes, extendiendo su apoyo a los "conciudadanos musulmanes".
El atacante, que se dio a la fuga, asestó decenas de puñaladas al fiel y después le grabó con un teléfono móvil mientras gritaba insultos contra el islam en la localidad de La Grand-Combe, en la región de Gard.
El primer ministro francés, François Bayrou, denunció una "atrocidad islamófoba".
El fiscal regional Abdelkrim Grini indicó el domingo que "ciertos elementos" podrían llevar a pensar que el "móvil antimusulmán" no fue quizás "el móvil principal (...) o el único móvil".
El presunto autor envió el video que había grabado con su teléfono -en el que se ve a la víctima retorciéndose de dolor- a otra persona, que luego lo compartió en una plataforma de redes sociales antes de borrarlo.
Una fuente cercana al caso, que pidió no ser nombrada, indicó que el presunto autor fue identificado como un ciudadano francés de origen bosnio que no es musulmán.
La víctima, un joven maliense de unos 20 años, y el atacante se encontraban solos en el interior de la mezquita en el momento del ataque.
Tras rezar inicialmente junto al hombre, el atacante apuñaló a la víctima hasta 50 veces antes de huir del lugar.
El cuerpo de la víctima no fue descubierto hasta más tarde por la mañana, cuando otros fieles llegaron a la mezquita para la oración del viernes.
El domingo por la tarde estaba prevista en París una manifestación "contra la islamofobia".
El atacante -al que sólo se ha identificado como Olivier, nacido en Francia en 2004 y desempleado sin antecedentes penales- es "potencialmente extremadamente peligroso" y es "esencial" detenerlo antes de que se cobre más víctimas, según el fiscal Grini.
M.Arroyo--HdM